Estaba a un solo paso de cumplir su sueño. Un simple movimiento, y todo habría acabado.
Todo comenzó como una mera ilusión, un simple deseo, un objetivo perverso. Vio cómo la miraba, pudo ver reflejado en su rostro cuáles eran sus intenciones. No se lo podía permitir, no podía salirse con la suya. Otra vez no.
Esta vez, se alzaría con la victoria, se impondría sobre él. Lo único que tenía que hacer, era mostrar debilidad, hacerle ver a través de sus ojos su rendición. Justo entonces, le arrancaría aquello que más anhelaba; su propia vida.
viernes, 31 de agosto de 2012
Intentó gritar. Intentó moverse. Todo fue en vano. Estaba
atrapado, inmovilizado, enjaulado. Su única salida, la única vía de escape de
la que disponía se encontraba al alcance de su mano, bastaba con alargar la
mano, coger el arma por el mango, y acabar con todo. Eso era lo que ella quería,
lo que estaba deseando ver. Y así lo hizo. Tanteó el suelo en busca de la
navaja, y cuando lo encontró, lo ocultó bajo sus ropas, esperando a la próxima
comida. No contaba con que el mal siempre va un paso por delante. El mal,
siempre gana. El bien, siempre muere.
miércoles, 14 de marzo de 2012
Creación infantil
Sus dedos palpaban los duros pezones de los senos de la mujer. El rostro desolado de la víctima le producía un placer extremo, tenía su vida en su poder. La cogió en brazos y la tumbó en el suelo. Le cosió los labios para callarla, le grapó los parpados para cegarla, le cortó los nervios para inmovilizarla. La metió en el maletero y la llevó a la plaza. Al ser de noche no había ni un alma en la calle. La ató a un poste, y tras echar un último vistazo a su muñeca, llamó a la policía.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)